Ella se escuda en ese frío que se acerca
Se viste bajo mil capas de lana para combatir el frío
sabiendo que no se puede devolver a la vida
algo que murió congelado.

Puede que nunca vuelva a ser una niña inocente,
pero jugará como tal en cuanto regrese la nieve.
En cuanto las plantas empiecen a dormitar
Parecerá la flor más hermosa del lugar.
Reirá como si su vida fuese a acabar al siguiente día,
aun que hace ya mucho que no se siente realmente viva.
Imaginará que la nieve cae en su honor, decorándola el pelo de blanca purpurina.

El viento mecerá su trenza
mientras abre su paraguas con la intención de salir volando.
Alabará ese invierno, que envuelve los colores en una tonalidad gris
Camuflando los problemas con el mundo exterior.
Y bailará sobre la tumba de los animales
Que al crudo invierno enfrentarse no quisieron.
Y se sentará al final en una esquina, tiritando
Maldiciendo ese frío tan deseado.